VICENTE PÉREZ
El histórico Camino del Hermano Pedro, una vía de trashumancia entre Vilaflor y la costa de Granadilla con más de 350 años de historia, en el sur de Tenerife, todavía sobrevive en parte de sus tramos y está propuesto para ser declarado Bien de Interés Cultural (BIC).
Pero en tanto se logra esa declaración legal, amantes y defensores del patrimonio natural y cultural llevan años intentando rescatarlo del olvido para concienciar de su importancia histórica y las oportunidades que además ofrecería su restauración para dinamizar la economía de los lugares que atraviesa.
En esta linea han promovido un manifiesto a favor de recuperar esta antigua vía pedestre y en contra de intervenciones que destrocen sus valores, como ya ha ocurrido en algunos tramos en obras incluso promovidas por los ayuntamientos de Vilaflor y Granadilla, con los que ya han iniciado contactos para exponerle esta preocupación y sus propuestas; y también por el Cabildo de Tenerife.
El documento está suscrito por los respectivos presidentes de la Fundación Internacional para la Conservación del Patrimonio (CICOP), el Club de Montañeros de Nivaria, la Asociación Montaña para Todos y el Grupo de Montañeros de Granadilla.
Los firmantes manifiestan «su total rechazo y completa oposición a las recientes obras de pavimentación en determinados tramos del camino original, que han supuesto la pérdida de los mismos y la modificación por materiales y superficies no compatibles con el uso agrícola y pedestre» de esta vía histórica.
Instan por ello a ambos ayuntamientos «a la preservación preventiva, conservación, recuperación y mantenimiento efectivos de los caminos públicos y, más concretamente, al tramo principal y a la búsqueda de criterios e intervenciones que hagan posible el uso sostenible, compatible y necesario entre actividades agrícolas, uso urbano y uso pedestre».
Un tesoro desde los 1500 metros de altitud hasta el mar
Como se detalla en el manifiesto, esta camino parte desde unos 1.500 metros sobre el nivel del mar y discurre a lo largo de 18 kilómetros, en el que el senderista encuentra «bancales, nateros y huertos de frutales; además de una flora representativa con matorral de cumbre, pinar, tabaibal-cardonal y matorral de costa; y a su vez una biodiversidad de gran interés que puede observarse a lo largo de todo el recorrido».
En realidad, explican sus defensores, se trata de un conjunto o red de caminos, que se extiende entre Vilaflor de Chasna y Granadilla de Abona, pero con una malla comunicacional que atraviesa los límites de estos términos municipales y que también comparten con los de Arona y San Miguel de Abona. Su recorrido principal, que no único, une el casco antiguo de Vilaflor con la Cueva del Hermano Pedro, cerca de la costa de El Médano. Esta antigua vía de trashumancia se une a otras seculares como el camino real de Chasna.
Explica el manifiesto que hace más de una década se propuso como una iniciativa que uniera los diferentes municipios de la comarca de Chasna. Desde el año 2005, se ha iniciado un trabajo de recuperación patrimonial, concienciación comunitaria y participación social y comarcal.
En los últimos decenios y por el paulatino abandono del aprovechamiento de recursos naturales de medianías y cumbres, estas redes de comunicación primarias se han visto confinadas a un segundo plano y, en la actualidad, han desaparecido o se han visto afectadas bien por el abandono de los transeúntes habituales y la consiguiente invasión de vegetación y deterioro del pavimento donde existiese, o bien por la desaparición física del camino para la ampliación de carreteras o por la construcción de urbanizaciones, entre otros aspectos.
Acuerdo parlamentario para declararlo Sitio Histórico
En octubre de 2017 el Parlamento canario aprobó por unanimidad una proposición no de ley “promover, de acuerdo con el Cabildo Insular de Tenerife, los trámites conducentes a la declaracióncomo Sitio Histórico del Camino del Santo Hermano Pedro», protección que a día de hoy aún no tiene. Y esta vía pedestre lo ha incluido el Cabildo entre los caminos estructurantes de la Isla, con dos anillos básicos, una horqueta distribuidora y otras vias.
El camino, según recuerda el manifiesto, ha sido escenario en las últimas décadas de importantes actividades para su divulgación, «con gran aceptación de miles de personas» que han participado en trece rutas oficiales diurnas (tramo casco de Vilaflor-Cueva) en de abril de cada año desde 2006 y catorce rutas nocturnas (tramo El Médano-antiguo ere) en septiembre desde 2005 a la última celebrada, en 2018.
Un patrimonio histórico que además ha tenido proyección internacional, pues ha sido incluido en el el proyecto SOSTURMAC, con Cabo Verde, desde la perspectiva de aportar valor añadido a la oferta de los dos archipiélagos, al orientarla a las nuevas tendencias del turismo científico y de naturaleza.
En el año 2015 le fue concedido el premio Impulso Sur, en su categoría de premio especial al camino del Hermano Pedro, que otorga anualmente Diario de Avisos.
Por todo ello, los suscribientes del manifiesto demandan de las administraciones públicas «un modelo de actuación de desarrollo sostenible que permita a la vez la conservación de los valores naturales del camino y fomente la promoción y mantenimiento de actividades tradicionales que se han venido desarrollando en el territorio objeto de este manifiesto».