VICENTE PÉREZ
Un debate promovido por el Consejo Insular de Aguas de Tenerife (CIAT) con motivo del Día Internacional del Agua ha puesto de manifiesto que las estaciones depuradoras industriales o intensivas ya planificadas son necesarias en las grandes poblaciones de Tenerife, pero que no puede descartarse la implantación de depuradoras extensivas o conocidas como ecológicas en localidades menos pobladas, aunque debe tenerse en cuenta que no se pueden demorar las inversiones para depurar las aguas residuales debido a las sanciones de la Unión Europea al estar superado ya el plazo para cumplir la normativa comunitaria en esta materia.
En las depuradoras intensivas o industriales se inyecta oxigeno -lo cual requiere usar energía- para que el proceso natural o ecológico se acelere y así poder depurar más cantidad de agua con mayor rapidez. En las extensivas o naturales el proceso En las extensivas o naturales el proceso es enteramente natural, sin acelerar el proceso biológico con tecnología que precise de gasto energético. Aunque en las extensivas se precisa también de un tratamiento primario para retirar los elementos sólidos y las grasas, idéntico al que se realiza con la depuración intensiva.
El debate, que se celebró la estación depuradora de aguas residuales de Valle de Guerra y se enmarca en un ciclo para la ciudadanía, tuvo una parte política y otra técnica. En la primera, moderada por el periodista Moisés Grillo, participaron Manuel Martínez (del PSOE y consejero insular de Aguas del Cabildo de Tenerife), José Joaquín Bethencourt (consejero delegado de Sodecán y exconsejero insular de Aguas, de CC) y Fernando Sabaté (consejero insular de Podemos). Estaba prevista también la participación de un representante del PP, Pedro Suárez, ex consejero insular de Aguas y en la actualidad presidente de la Autoridad Portuaria provincial, aunque finalmente le fue imposible asistir
En la parte técnica, moderada por el periodista Enrique Hernández, intervinieron Abel Herrera, exdirector del parque rural de Teno; José Fernández, exgerente del CIAT; Beatriz Ramírez (de la empresa WTS) y Emilio Fernandez (director de Aqualia Canarias).
«No veto las depuradoras extensivas, pero hay un plan hecho»

En el debate político, el consejero insular de Aguas, Manuel Martínez, subrayó que la isla necesita al menos una inversión pública de mil millones para completar su red de alcantarillado, y alertó de que «muchos pueblos en Tenerife están en la Edad Media porque tiran el agua a pozos en el subsuelo» , por lo que opinó que debe prohibirse este sistema cambiando la Ley del Suelo de canarias porque a su juicio contraviene la legislación europea.
Abogó Martínez por que en el tercer ciclo del Plan Hidrológico, que se comenzará a elaborar, se estudien las necesidades de cada aglomeración urbana de Tenerife y cómo se puede cumplir con las directivas europeas, incluso teniendo en cuenta las depuradoras extensivas, «de las que soy partidario» pero hay que tener en cuenta que sí o sí hay deben construirse nuevas instalaciones para reciclar aguas negaras y no verterlas al mar, porque «estamos pagando sanciones impuestas por la UE con dinero de todos los ciudadanos».
Por, ello, previno que si se quieren construir depuradoras no industriales, «hay que cambiar el modelo planificado, y por tanto, el marco normativo». Con ello, dijo, no está vetando ese otro sistema de depuración, sino que, insistió, deben tenerse en cuenta las circunstancias que antedichas.
Además, defendió precios de la nueva agua depurada razonables para los agricultores, incluso mediante una política de subvención durante unos años para incentivar su comercialización.
«Hay que estar abiertos a los dos sistemas»

En el debate político, Bethencourt afirmó que no se puede hablar de dos modelos de depuración enfrentados, pues «hay que estar abiertos» a ambos, dado que «sería prepotente pensar que solo el modelo extensivo es el bueno, al igual que sería malo demonizar la tecnología del intensivo, ya que esta isla es muy compleja».
Asimismo, indicó que «el mayor problema que tiene Tenerife ahora mismo es el saneamiento , y si bien cree que hay que invertir en alcantarillado, considera que la normativa europea » a veces es difícil de cumplir porque está alejada de la realidad» y por ello la Ley del Suelo permite los pozos para verter aguas residuales, «pues no podemos cambiar la realidad a corto plazo».
«La depuración ecológica funciona ya en poblaciones pequeñas»

Sabaté, que además de consejero de Podemos es profesor de Geografía en la Universidad de La Laguna, puso de relieve que «se ha abierto un debate desde la Isla Baja, San Juan de la Rambla y la comarca de Acentejo, entre dos soluciones: una con tecnología y otra natural, lo que tiene que ver con mayor o menor control ciudadano de esos procesos y con mayor o menor dependencia del exterior en energía».
Enfatizó que el sistema de depuración ecológico ha funcionado ya en localidades pequeñas, pero considera posible «extenderla a los sistema medios de Tenerife, por ahorro de energía y no depender de las grandes compañías».
«Y en el futuro se verá si se pueda trasladar ese método a las grandes aglomeraciones urbanas», apuntó. A su juicio, «no se puede descalificar ni a un sistema ni a otro, hay que estudiar cada caso concreto».

En el debate técnico, quien fuera durante muchos años gerente del Consejo Insular de Aguas de Tenerife, José Fernández, defendió el modelo vigente diseñado en el Plan Hidrológico, en el que se prevén grandes depuradoras industriales para poder cubrir el volumen de las zonas urbanas de Tenerife, por lo que no cree viable las ecológicas en las comarcas más pobladas.
«Las EDAR naturales para mucha población no lo veo»

«Caer en la fragmentación de muchos centros de depuración con tecnologías blandas no lo veo, aunque ese método ecológico lo respeto para sitios con población reducida y mucho territorio; pero hay que tener en cuenta las economías de escala; lo demás son cantos al sol», sostuvo José Fernández.
Además, advirtió de que, como la normativa va cambiando y se exige cada vez «retener más sustancias indeseadas,» con las depuradoras ecológicas eso es muy difícil, por no decir imposible» de lograr.
«Las ecológicas son viables y generan energía»
Emilio Fernández, director de Aqualia en Canarias, explicó que su empresa ya tiene un proyecto piloto en la Península (en el municipio de Chiclana, con unos 50.000 habitantes) que utiliza algas, es decir, un sistema ecológico, para depurar, y los subroductos obtenedios permiten generar biogás, con el que se mueven 10 vehículos de ese Ayuntamiento.

Y a renglón seguido llamó la atención de que las condiciones climáticas de Canarias son aún mejores para esas algas, por lo que se trata de una iniciativa extrapolable a Tenerife.
«Con las depuradoras ecológicas, ya no se consume energía, sino que la genera», apostilló, antes de alertar de que con el cambio climático aumentarán las sequías y el agua será cada vez un bien más escaso.
En cualquier caso, el directivo de Aqualia también quiso dejar claro que «la tecnología hoy ya permite que una depuradora no sea un monstruo, puesto que se han eliminado por completo los malos olores y no hacen ruido».

«Deberíamos apostar por la depuración natural»
Abel Herrera se declaró firme partidario de las depuradoras ecológicas como las experimentadas en el Parque Rural de Teno: «Tenemos un sistema que funciona por gravedad y sin consumo energético. Deberíamos apostar por ellos en municipios como Buenavista, con 4.000 habitantes, donde, para evitar bombeos, podrían habilitarse 4 estaciones de depuración natural (uno en el caso, otro en el campo de golf, otro en la urbanización de El Tejar y un cuarto en Las Canteras)».
Admitió que la salinidad «sería un problema», sobre todo para los cultivos de plátanos, por lo que ese aspecto habría que resolverlo.
Señaló el ex director del Parque Rural de Teno que con este sistema natural «una EDAR es un jardín, no huele ni hace ruido, y la podría mantener un técnico municipal, como los propios trabajadores de jardinería».
«No existe una solución única: caso por caso»

La directora de WTS, empresa especializada en la construcción de membranas para depuradoras, optó por no descartar ninguno de los dos sistemas: «No existe una solución única para todas las necesidades, por lo que habrá que estudiar los sistemas que sean más eficaces para cada lugar en función de la cantidad de efluentes y de energía disponible».
En todo caso, previno de que «con tecnologías más limitantes, a lo mejor habría que renunciar a crecimiento económico». Pero en todo caso subrayó que «Tenerife es un referente a nivel europeo y fuera de la UE y debemos sentirnos orgullosos».