VICENTE PÉREZ
El director general de Patrimonio Cultural del Gobierno canario, Miguel Ángel Clavijo, se muestra «optimista» sobre las posibilidades de que la momia guanche mejor conservada que ha llegado a nuestros días, en poder del Museo Arqueológico Nacional (MAN), por fin pueda retornar a Tenerife, tras décadas de reclamaciones por parte de las Administraciones públicas canarias a la del Estado.
«Tanto el Cabildo de Tenerife como en el Gobierno canario creemos que en esta ocasión tenemos una buena oportunidad de resolver satisfactoriamente este asunto para los intereses de la comunidad canaria, y además es que es de justicia histórica», declaró Clavijo, entrevistado en la cadena SER.
La conocida como la Momia de Erques (porque se encontró en el barranco de igual nombre, en Arico, en 1763), es una de las cinco momias guanches que albergaba el Museo Nacional de Antropología de Madrid en la década de los 70, y fue trasladada al MAN mientras las demás fueron devueltas a Tenerife.

Ahora estos restos embalsamados de una mujer guanche han vuelto a ser noticia porque el Ministerio de Cultura ha decidido retirar de sus exposiciones al público los restos humanos.
Por esta razón, la momia ha sido trasladada a un almacén del citado Museo Arqueológico Nacional lo cual ha reavivado la reivindicación del Cabildo tinerfeño para que este bien cultural vuela a la isla.
«Yo creo que ya es hora de que eso ocurra; es un buen momento para dejar resuelto este asunto», señala Clavijo, «porque tenemos los recursos, los museos y los profesionales» para que la momia esté perfectamente conservada en Canarias.

En este sentido, destaca la labor del Organismo Autónomo de Museos de Tenerife y la del Instituto Canario de Bioantropología, que dirige Conrado Rodríguez Maffiote.
De ahí que el director general se muestra convencido de que los actuales responsables del Ministerio de Cultura «serán incapaces» de negar el traslado de la momia con «excusas» como la de la falta de medios en Canarias para su conservación o problemas para el transporte.
Clavijo, que es profesor de Gestión de Patrimonio Cultural en la Facultad de Humanidades de la Universidad de La Laguna, afirma que esta cuestión trata de «nuestros antepasados» pues «todo el mundo que sepa un poco de historia de Canarias sabe precisamente que en el caso de Tenerife, los guanches sobreviven a la conquista, se bautizaron, siguieron viviendo en la isla, dedicándose a la ganadería unos, otros al comercio». «De modo que son nuestros antepasados directos», reitera.

Desde esa perspectiva, el responsable del área de Cultura y Patrimonio Cultural en el Ejecutivo regional defiende que el retorno de estos restos mortales «debe estar al margen de partidismos y ideologias políticas; cualquier ciudadano entiende que esta momia debe estar en su casa, que es Tenerife».
Distinta es la cuestión sobre si se deben exponer o no restos humanos en los museos (el Ministerio de Cultura se ha decantado por que no). Al respecto, Clavijo dijo que comparte «bastante» este criterio ético, «sobre el que viene reflexionándose en Canarias desde los tiempo de Fernando Estévez, un antropólogo muy importante», fallecido en 2016.
En todo caso, observa que en este «interesante» debate «hay matices» y reconoce que es algo que abordar cuando la momia retorne e Tenerife, si bien atribuyó la decisión al Cabildo, porque los museos son de su competencia.