VICENTE PÉREZ
La terrazas desmontables que ocupan la plaza de San Francisco, de Santa Cruz de Tenerife, carecen aún de la obligatoria autorización del Cabildo de Tenerife, al estar situadas en un entorno de protección de un Bien de Interés Cultural (BIC), categoría que ostenta la iglesia de igual nombre, declarada monumento.
Así lo advirtió a fines de 2017 un informe del Cabildo de Tenerife, a través de su Servicio de Patrimonio Histórico, en contestación a una denuncia de la Asociación de Vecinos El Perenquén, que ahora volverá a insistir sobre este asunto a las Administraciones Públicas. Según ha podido saber este diario, estas terrazas continúan sin estar autorizadas conforme al procedimiento que establece la Ley de Patrimonio Histórico de Canarias.
En su informe, el Cabildo recordaba que en mayo de 2008 la Comisión Insular de Patrimonio se había pronunciado acerca del anteproyecto presentado sobre la viabilidad de la ocupación de la vía pública para este fin, y que ese órgano dictaminó que la propuesta era «excesiva» para ese entorno de un BIC, «por lo que debería plantearse una solución más respetuosa, no ocultando los jardines y limitando la ocupación de la vía al frente de los locales que van a explotar la actividad».
Dicho servicio técnico insular dejó claro que la documentación presentada al respecto «se realizó a título de consulta, por lo que la instalación de mesas, sillas, toldos, carpas, sombrillas o elementos similares requería de la preceptiva autorización del Cabildo Insular», al que no le constaba «solicitud alguna ni autorización dictada respecto al mobiliario urbano existente en la plaza de San Francisco».
El área de Infraestructuras del Ayuntamiento de Santa Cruz informó a principios de febrero, ante una pregunta formulada por IUC a raíz de las quejas de El Perenquén, que en la actualidad hay 19 terrazas en el municipio que ocupan sin licencia espacios públicos de la ciudad, mientras que otras 70 tramitan la renovación del permiso correspondiente y 168 tienen autorización en regla. Los datos son notablemente mejores que hace apenas dos años, pues en 2017 eran 76 las terrazas ilegales en la vía pública, según esta misma fuente oficial.