PLANETA CANARIO
La imposibilidad durante buena parte del estado de alarma de dar la última despedida a los seres queridos que fallecen, sean por coronavirus o no, ha sido una de las circunstancias más dolorosas en esta pandemia. En la fase 2 se ha permitido incrementar el número de asistentes a velatorios y entierros, aunque, en Guía de Isora, el último adiós a un motorista de 36 años fallecido de forma trágica en accidente, ha desbordado las medidas de seguridad contra los contagios de Covid-19, pues se reunieron más personas de las previstas en la normativa y una parte no llevaba mascarilla ni guardó la distancia de 2 metros entre sí.
El Ayuntamiento este municipio tinerfeño ha informado de que «lamenta profundamente la inesperada acumulación de personas» durante este funeral celebrado este lunes 25 de mayo en el municipio. En la comitiva que hizo el recorrido entre la iglesia y el cementerio, a través de vías que en algunos lugares se estrechan, muchas personas no llevaban mascarilla ni respetaban la distancia de seguridad de 2 metros.
El consistorio ha explicado este 27 de mayo en un comunicado que, «tras el fallecimiento de un vecino, -muy conocido en el municipio y aficionado al motor-, la corporación recibió una solicitud de una asociación de motoristas para rendirle un homenaje» y «se permitió –mediante autorización- el acompañamiento del féretro, siempre exigiendo el cumplimiento de la normativa, con un número limitado de vehículos, en una zona anexa al cementerio y a la plaza de la Iglesia».
La corporación expone que encargó, «en cumplimiento de la normativa para la fase 2 un dispositivo de seguridad para dos entierros que tenían previsto celebrarse ese día en el municipio y la Policía Local acudió e informó en todo momento a los asistentes de la necesidad de tomar las medidas de distanciamiento social para prevenir el contagio de la Covid-19, con el apoyo de Ayuda en Emergencias Anaga (AEA)»
Pero el Ayuntamiento reconoce que fue «una situación que se desbordó de forma imprevista», si bien asegura que «en todo momento se ha intentado actuar desde el respeto a los familiares del fallecido, sin dejar de velar al mismo tiempo por el cumplimiento estricto de la normativa tal y como han acatado otras personas del municipio desde el inicio del estado de alarma» y lamenta también» la molestia que esta situación excepcional pueda haber causado a la ciudadanía».
Guía de Isora es uno de los municipios de Tenerife que más tiempo lleva sin casos de coronavirus, unos dos meses, y no ha registrado fallecimientos por esta pandemia.
Según una orden publicada en el Boletín Oficial del Estado por el Ministerio de Sanidad el pasado 16 de mayo, «los velatorios podrán realizarse en todo tipo de instalaciones, públicas o privadas, con un límite máximo, en cada momento, de veinticinco personas en espacios al aire libre o quince personas en espacios cerrados, sean o no convivientes».
Dicha normativa establece que «la participación en la comitiva para el enterramiento o despedida para cremación de la persona fallecida se restringe a un máximo de veinticinco personas, entre familiares y allegados, además de, en su caso, el ministro de culto o persona asimilada de la confesión respectiva para la práctica de los ritos funerarios de despedida del difunto».
«En todo caso, deberán respetarse las medidas de seguridad e higiene establecidas por las autoridades sanitarias para la prevención del Covid-19, relativas al mantenimiento de una distancia mínima de seguridad de dos metros, higiene de manos y etiqueta respiratoria», estipula la orden ministerial.