RUBÉN EXPÓSITO
La realidad constantemente supera la ficción. Un conductor que transitaba por los aparcamientos de Las Teresitas comienza a escuchar el ruido de la pita de un Citroen C3 estacionado, el amigo se acerca y se encuentra lo que en principio, cualquiera podría calificar de secuestro. Una mujer amordazada dando golpes con la cabeza al volante hacía sonar el cláxon pidiendo ayuda desesperadamente. El señor, con celeridad, avisa a las autoridades.
Llega la policía y se encuentra con un rodaje amateur de una película erótica
Llega la policía. Los agentes se acercan al coche y se encuentran con una visión que igual no les deja dormir en un tiempo, una mujer maniatada con bridas y cinta americana al volante, con las palmas de las manos hacia sí misma y con severas lesiones en ambas muñecas apenas puede respirar y lucha por liberarse de sus ataduras. Lo que le impide tomar aire es que también tiene cinta que le amarra fuertemente el cuello, lo que provocaba, debido al estrangulamiento, que no pudiera hablar (por la boca, porque por los ojos pedía auxilio con lágrimas y en código morse )
Los policías lograron liberarla, mientras ella les contaba que solo trataba de ver qué se sentía viviendo una escena erótica de la famosa película 50 sombras de Grey. En lo que los policías intentaban cerrar la boca que se les quedó abierta de la impresión ante semejante panorama (habrán pensado que no se hicieron policías para estas cosas), atinaron a llamar a una ambulancia para que trasladase a la señora de Christian Grey a un centro hospitalario. No se sabe si a estas horas, el multimillonario señor Grey habrá llegado con el Citroen C3 a La Candelaria a buscar a su mujer…