Tenerife Noir lleva cuatro años haciendo de Santa Cruz de Tenerife la capital canaria del género negro, con la vista puesta en convertirla en la capital atlántica del noir. En su nombre completo, el festival se identifica con el océano, porque pone un ojo en Europa y otro en América, para, fiel a las tradiciones culturales de Canarias, usar la posición geográfica y los vínculos históricos con el fin de crear un programa cultural genuino, original y, al mismo tiempo, cosmopolita.
El Festival Atlántico de Género Negro desplegó un programa de diez días, hasta el 31 de marzo, dedicados a las distintas expresiones artísticas negrocriminales, especialmente, la literatura y el cine, aunque en su agenda no pueden faltar la fotografía, el teatro y la gastronomía, ingredientes fijos del menú que ofrece cada año desde 2016 al público de Santa Cruz. El festival llegó en el momento justo y, en su corta trayectoria, se ha convertido en un referente, con un público creciente y con nuevos aspectos que van enriqueciendo su contenido.
Así es como surgió la rama académica de Tenerife Noir, al transformarse una sección de conferencias especializadas en el seminario de género negro de la Universidad de La Laguna, que este 2019 se desarrolló el jueves 28 y viernes 29 de marzo. Así, esta faceta del festival se unió a otras que no son exclusivamente artísticas, como el Taller Prison Break, que, desde la primera edición, en 2016, pone en marcha un trabajo de la situación de aprendizaje Autopsia del Relato Criminal con reclusos del Centro Penitenciario Tenerife II, que este año mantuvieron un encuentro con el escritor y detective privado Rafael Guerrero.
Centrándonos en la literatura, pasaron por la Librería de Mujeres de Santa Cruz autores de la talla de Juan Madrid, Julián Ibáñez y Berna González Harbour. Los creadores de Toni Romano, Bellón y la comisaria Ana Ruiz, respectivamente, mantuvieron un exquisito encuentro en el que las reflexiones sobre su quehacer literario los llevó más a hablar de Cervantes, Hemingway, Chandler, Tolstoi, que sobre los crímenes que les permiten construir una propuesta ética a partir de lo abominable.
Hasta el sábado 30, Tenerife Noir nos citó en la Librería de Mujeres para asistir a dos mesas redondas el martes 26 de marzo: Tomando pulso al género negrocriminal hecho en Canarias, con la participación Saúl Cepeda, José Luis Correa y Cristian Santana bajo la moderación de Eduardo García Rojas y Homenaje a Antonio Lozano, creador del inspector García Gago y voz de los que no tienen voz, con Eduardo García Rojas, José Luis Correa.
En el Ámbito Cultural de El Corte Inglés se entregó el Premio Wilkie Collins de Novela Negra que concede M.A.R. editor a Enrique Pérez Balsa y Jesús Javier Corpas Mauleón, seguida de la presentación de las obras de estos autores, respectivamente: El edén de las manitas de cerdo y Desayuno para el muerto.
El 28 de marzo todas las actividades se concentraron en el desarrollo del Seminario de Género Negro de la Universidad de La Laguna, en el Campus de Guajara, que continúa el 29 de marzo. Ese día, la Librería de Mujeres vuelve a convocar al público para tratar con Eduardo García Rojas entrevista a David Llorente en la sección En el punto de mira Madrid frontera para continuar con una mesa redonda sobre el cómic, El cómic y el género negrocriminal, en la que participaron Ángel de La Calle, Eduardo García Rojas y Eduardo González.
Las actividades literarias concluyeron el 30 de marzo con sendas mesas redondas en la que habrán participado todos los autores aspirantes al premio Ciudad de Santa Cruz que se concede esa noche. Así, en la mesa La construcción de las protagonistas en el género negrocriminal. Una tendencia al alza, participaron las escritoras Clara Peñalver y Noelia Lorenzo (11:30h) y en Los escenarios de la novela negra española: lo urbano y lo rural participronn Francisco Bescós y Francisco Gómez Escribano (12:30h).
Antonio Lozano
Esta cuarta edición huele a homenaje sentido y emocionado al escritor Antonio Lozano, que nos dejó hace algo más de un mes, y que estuvo vinculado desde sus inicios a Tenerife Noir. El escritor y promotor cultural nacido en Tánger y residente en Agüimes fue primer autor que lució un ejemplar exclusivo de Borsalino, el afamado sombrero de fieltro de diseño italiano escogido por el festival como símbolo para acreditar el Premio Negra y Criminal que concede a un autor por su trayectoria. Lozano recogió su borsalino en 2016 y, en estos cuatro años se han sumado Andreu Martín y Juan Madrid, que lo compartieron en 2017, Petros Márkaris y Alicia Giménez Bartlett, que también compartieron galardón, en 2018 y, en esta cuarta edición, Julián Ibáñez. Para Tenerife Noir, este premio es uno de los premios más entrañables que se entregan en este festival, porque en su nombre recoge el testigo de la que fuera la meca de las librerías especializadas en este género en España, la librería de Paco Camarasa en Barcelona.
Premio Ciudad de Santa Cruz
Uno de los principales premios que entrega Tenerife Noir es el Ciudad de Santa Cruz, con el que se reconoce a la mejor novela publicada en nuestro país en el año anterior de la edición en curso. En 2019, cuatro son las novelas aspirantes a obtener el reconocimiento de un jurado integrado por el director de contenidos de la Semana Negra de Gijón, Ángel de la Calle; la escritora Yurena González; la librera de Librería de Mujeres de Tenerife, Izaskun Legarza, y el crítico y periodista Eduardo García Rojas.
Las aspirantes a llevarse un premio en metálico de 3000 euros –algo insólito en el género en España– Corazones negros (editorial Eiren, colección Cosecha Roja), de Noelia Lorenzo; Cuando gritan los muertos (Alrevés editorial), de Paco Gómez Escribano; Las voces de Carol (EdicionesB), de Clara Peñalver, y El porqué del color rojo (Salto de página editorial), de Francisco Bescós.
14 cortometrajes seleccionados para el concurso
Tenerife Noir Express seleccionó 14 cortometrajes para su concurso entre los 22 realizados por las 124 personas inscritas para realizar un corto noir durante seis días Santa Cruz inspirado en las novelas Harraga, Preludio para una muerte, El caso Sankara y La sombra del minotauro, de Antonio Lozano, a quien el Festival Atlántico de Género Negro Tenerife Noir rindió homenaje de varias formas en su IV edición, que concluyó este domingo, 31 de marzo.
“La temática noir, con su estética clásica, lleva tres ediciones demostrando que tiene buena cabida en el audiovisual canario y este sábado volvió a quedar patente, con una espléndida recopilación de trabajos, donde los participantes han subido no solo el nivel técnico de años anteriores, sino también las cuotas de creación y calidad de los productos”, manifiesta el director de Teneirife Noir Express en su tercera edición, el periodista y crítico cinematográfico Manuel Díaz Noda.
“Los premios delatan también el espléndido sentido del humor que marcó algunos de los cortometrajes, especialmente en los títulos Ibérico y Macario, el sicario. El trabajo de Diego Lupiáñez vino también cargado de una fuerte carga social, mientras que la influencia del neonoir de autores como Quentin Tarantino se puede apreciar en Juego de ratas, de Marina González o The city shallow us, de Víctor Outón”, apunta el experto.
Tenerife Noir entregó en la mañana de este sábado los premios que concede en Teneirfe Noir Express, con los que reconoce las distintas facetas artísticas de la realización cinematográfica a los equipos que han tomado durante seis días las calles y espacios públicos de Santa Cruz de Tenerife para convertirlos en escenarios de sus cortos.
El palmarés incluye el premio al Mejor Cortometraje Noir, concedido a Ibérico, de Diego Lupiáñez, Mejor Interpretación, que fue para Javier Socorro, por Ibérico; Mejor Plano Noir, para The city shallow us, de Víctor Outón. El premio a la Mejor Fotografía Noir recayó en Mentí, por su trabajo en Ja Doria; el Mejor Guion Noir fue para Macario, el Sicario, de Idir de Luca. Mejor Montaje Noir fue concedido a Juego de ratas, de Marina González, y el Premio del Público fue Macario, el sicario, de Idir de Luca. Asimismo, el jurado otorgó tres menciones especiales como Mejor Muerte Noir, para Idaira Santana por Lo mejor del mundo; Mejor Sonido, para Miguel Herrera Alpert, por Ibérico y Mejor Dirección, para Marina González, por Juego de ratas.
Tenerife Noir Express es un concurso de cortometrajes en el que los equipos de creadores disponen de menos de siete días para preparar, grabar, editar y entregar sus cortometrajes con una duración máxima de cuatro minutos de género negrocriminal y policíaco y bajo la temática definida por la organización. Esta iniciativa aspira a cubrir en Tenerife un vacío ampliamente demandado y pretende sumarse a otros certámenes reconocidos en Canarias, como la sección de cine express del Festival Internacional de Cine de Gáldar y el Festivalito de la Palma.