VICENTE PÉREZ
El alcalde de Arico, Sebastián Martín, se ha remitido al estudio de impacto ambiental presentado por los promotores de los 4 hoteles previstos en Punta de Abona para dar por bueno que el proyecto no afectará a los ecosistemas dunares ni a la alimentación de arena de las dos playas situadas al sur de este ámbito, las de Los Abriguitos y de los Cardones, ni tampoco se vería afecado por posibles cambios en el domino público marítimo terrestre ya que las construcciones hoteleras «van a estar pegados a la autopista» del Sur de Tenerife.
El grupo de Sí Podemos Canarias en el Cabildo sostiene lo contrario, que Punta de Abona es un ecosistema dunar en el que la arena que entra en tierra por el norte continúa hasta la zona sur suministrando de arena las playas de ese extremo, lo que sería justificación para ampliar de forma significativa la franja de dominio público marítimo terrestre en este saliente del sur de Tenerife.

Tal planteamiento de Sí Podemos y otras fuentes consultadas por PLANETA CANARIO presenta aparentes pruebas sobre el terreno, como es el hecho de la presencia del mismo tipo de arena marina en todo el ámbito (menos evidente en la parte central, donde se halla la llamada leprosería, zona en la que hay poca vegetación y está el terreno muy machacado por la actividad humana), la absoluta e indudable predominancia de los vientos alisios en esta zona (con dirección nordeste) y la ubicación de las playas de Los Abriguitos y Los Cardones justo al final del corredor de arena que se iniciaría en la playa de Los Abrigos.
Sin embargo, el autor del estudio aportado por los promotores de la urbanización sobre la dinámicas de las arenas, el doctor en Geografía por la Universidad de Las Palmas Antonio Ignacio Hernández Cordero, llega a otras conclusiones, según las cuales esas tres playas no tienen relación entre sí, y, sorprendentemente, solo tiene en cuenta el hegemónico viento del nordeste en la duna existente en Playa Grande, en El Porís, pero no en las arenas de las playas situadas al sur de esa punta, cerca de la urbanización de Abades. De modo que este geógrafo excluye que en estas dos últimas playas influyan los alisios, y ello a pesar de que el propio autor señala en su estudio, lo cual es un dato irrebatible experimentalmente, que es el viento con diferencia dominante en la zona.Y en toda Canarias.
Conforme a la Ley de Costas, todo ese corredor de arena pudiera ser declarado dominio púlbico si, como ha dado a entender Sí Podemos Canarias, se pide la revisión del deslinde en ese tramo.
Pues bien, el alcalde, en declaraciones a Mírame TV confirmadas posteriormente a PLANETA CANARIO, se remite al informe realizado por dicho geógrafo, y contenido en el documento ambiental de este expediente administrativo, para señalar que «no hay relación directa» entre las playas de ambos extremos, aunque reconoce que en el propio estudio de impacto se plantea «dejar una franja de funcionamiento de la dinámica de las arenas» para «el caso de que existiera» tal circulación de este material de un lado a otro.
Sebastián Martín recordó que su partido, Primero Arico fue el único que hizo alegaciones al proyecto, con el fin de que se cambiara el modelo turístico de Tenerife, en el sentido de que debe ser una instalación hotelera sotenible, que cumpla con los objetivos de desarrollo sostenible de la ONU, que genere su propia agua y energía, y tenga un círculo de gestión de residuos cerrado, incluyendo la depuración de las aguas, que genere empleo local (Arico tiene 700 parados) y consuma productos de cercanía (Arico es el municipio con mayor producción ecológica de Tenerife).
Tales alegaciones, según el regidor municipal, han sido asumidas por los promotores de manera verbal, por lo que espera que se plasmen en el proyecto que finalmente se ejecute.

El alcalde puso de relieve que la nueva ordenación territorial que se tramita para esta zona tiene, por iniciativa de los promotores, un menor impacto que lo previsto en las propias Normas Susdiarias actuales de Arico y del Plan Insular de Ordenación del Territorio, de modo que la empresa que promueve este complejo turístico «quiere construir los hoteles alejados de la costa, y no construirán el campo de golf previsto inicialmente, y además deberán proteger especies amenazadas en la zona».
El regidos municipal, frente a las crítcas que le pueda suponer su apoyo a esta urbanización de parte de Punta de Abona, echó la vista atrás para presumir de que su partido «viene del ámbito de la ecología» pero que ahora ante la disyuntiva de oponerse al proyecto o pedir su modificación, ha optado por estés segunda vìa.
«Queremos cambiar el modelo masificado de Tenerife, basado solo en sol y playa, por otro más sotenible, y para ello estamos en conversaciones con el grupo promotor», subrayó. «El proyecto definitivo no lo hemos visto, estaremos vigilantes», apostilló el alcalde.
