PLANETA CANARIO
Un estudio en el que se ha realizado la caracterización genética de la población canaria contemporánea a través del análisis del ADN mitocondrial concluye que la huella aborigen persiste en los genes de la población actual de Canarias, y evidencia que esta contribución materna es ligeramente superior a la observada por estudios previos, alcanzando niveles en el rango de 51.5%-60.43%. Además, se ha constado un marcado crecimiento demográfico de linajes que son de supuesto origen aborigen desde la conquista europea.

El estudio ha sido publicado en la revista centífica iScience del grupo Cell Press y ha sido desarrollada conjuntamente por personal idel Área de Genómica del Instituto Tecnológico y de Energías Renovables (ITER), dependiente del Cabildo Insular de Tenerife; el Hospital Universitario Nuestra Señora de Candelaria (HUNSC), la Fundación Canaria Instituto de Investigación Sanitaria de Canarias (FIISC), y el investigador Vicente Cabrera, profesor jubilado de la Universidad de La Laguna.
El estudio señala dos acontecimientos importantes: el colapso poblacional de los aborígenes canarios tras la conquista en el siglo XV y la llegada de colonos procedentes de otras regiones continentales de Europa y África. Para profundizar en la impronta del proceso histórico, los investigadores analizaron mediante secuenciación masiva de ADN en el Área de Genómica del ITER el genoma mitocondrial (mtDNA) de 896 canarios no emparentados.
Respaldo a que los primeros pobladores llegaron a principios del primer milenio

El estudio ha estimado la contribución genética materna de todas las demás fuentes de población en función de las afinidades de coincidencia. Como era de esperar, explican los autores, la principal aportación a Canarias ha sido la de la Península Ibérica (39,14%±8,12%), seguida de las poblaciones del Norte de África (21,57%±10,53%), la Atlántica (19,29%±5,65%). %), los africanos subsaharianos (12,29 % ± 5,41 %) y los italianos (7,57 % ± 2,37 %)
Los partidos por parejas para el Atlántico fueron principalmente con danés.
Además, las estimaciones de edad para la mayoría de los linajes fundadores autóctonos respaldan una primera llegada aborigen a las islas a principios del primer milenio.
Mayor prevalencia aborigen de lo esperado por vía materna

La investigación, financiada por el Ministerio de Ciencia e Innovación del Gobierno de España, la Fundación CajaCanarias la Fundación Bancaria La Caixa y el Cabildo de Tenerife, tiene como objetivo el análisis del impacto del proceso de colonización de las Islas Canarias sobre la composición genética actual de los habitantes del archipiélago mediante una aproximación genética sin precedentes.
Los resultados de esta investigación evidencian la existencia de continuidad de las contribuciones maternas aborígenes y su persistencia en la genética de la población actual de las islas alcanzando un valor promedio superior al 50%, porcentaje mayor a lo inferido en estudios previos. Además, los análisis llevados a cabo apoyan una primera llegada a las islas de los aborígenes a principios del primer milenio de la Era.
Gallegos e italianos (y norteafricanos en Lanzarote), destacados en los genes de Canarias

El investigador y principal autor del estudio, el doctor Víctor García Olivares, afirma en un comunicado del Cabildo tinerfeño que “este estudio ha permitido revelar, por primera vez, las principales influencias genéticas continentales en la población de las islas, destacando las influencias portuguesa y gallega en la genética de la población de todo el archipiélago, excepto en la isla de Lanzarote, donde prevalece la influencia norteafricana.”
Por otro lado, destaca la importante influencia atlántica en las poblaciones de las islas de El Hierro y La Palma, la alta prevalencia de linajes más propios del África subsahariana en la isla de Gran Canaria, y la existencia de linajes maternos poco frecuentes que atestiguan las conexiones con las poblaciones del continente americano.
En conjunto, el estudio coordinado por el doctor Carlos Flores, responsable científico del Área de Genómica e investigador principal de FIISC-HUNSC, proporciona la más amplia y completa caracterización de la variación genética de la población de las Islas Canarias realizada hasta la fecha desde la perspectiva de la herencia materna que aporta el estudio del ADN mitocondrial, según destaca el Cabildo.
Las islas más orientales guardan mayor relación genética con poblaciones norteafricanas

Estudios previos han abordado la historia poblacional reciente de Canarias desde una perspectiva genética. Sin embargo, según señalan los autores de este trabajo, «la mayoría de ellos se han centrado en desentrañar las relaciones de los aborígenes canarios nativos con las poblaciones africanas actuales y la mayoría carecía de una evaluación detallada de las contribuciones genéticas europeas que se han producido después de la conquista española del archipiélago».
Con un número sin precedentes de mitogenomas completos secuenciados para la población canaria actual, este nuevo estudio proporciona la caracterización genética materna más grande y completa de las poblaciones actuales de las Islas Canarias.
Los autores concluyen que las islas occidentales de Tenerife, La Gomera, La Palma y El Hierro están más relacionadas con las poblaciones ibéricas y el área atlántica (especialmente evidente para La Palma y El Hierro). Por otro lado, las islas orientales de Gran Canaria, Fuerteventura y Lanzarote mostraron comparativamente más afinidades de mtDNA con las poblaciones africanas.
Casi la mitad del acervo genético materno, tras la conquista castellana
Los hallazgos de este estudio revelan que casi la mitad del acervo genético materno de los canarios actuales ha sido aportado por influencias posteriores a la conquista. Además, ha sido posible cuantificar, a escala insular, las aportaciones de distintas regiones continentales en el acervo genético de la población canaria actual, sustentando el impacto diferencial de los asentamientos poblacionales a lo largo del archipiélago en el periodo posterior a la conquista.
Un ejemplo de este evento demográfico lo avala la alta prevalencia de secuencias de origen africano subsahariano en Gran Canaria, que jugaron un papel fundamental en la industria productora de caña de azúcar.
Por otro lado, las islas de Lanzarote, Fuerteventura y El Hierro basaron sus economías en la explotación agrícola y ganadera convencional de la época.
Una peculiaridad del poblamiento de las islas orientales de Lanzarote y Fuerteventura fue el impacto de moros y moras en su desarrollo demográfico, lo que encajaría con estimaciones anteriores, sugiriendo que la población de origen morisco se estimaba en casi un tercio de la población canaria en el siglo XVI. Por tanto, los resultados de esta investigación genética apuntan al importante papel de la inmigración forzada de africanos subsaharianos y esclavos moriscos en la repoblación de las islas.

Exponen los autores de este trabajo que, «a pesar de la reciente homogeneización de la población canaria debido a las frecuentes migraciones interinsulares, los resultados encajan en líneas generales en las crónicas históricas de estos asentamientos durante y después de la conquista».
En el extremo occidental del Archipiélago, las poblaciones de El Hierro y La Palma tienen la mayor proporción de influencias atlánticas, principalmente de origen normando y flamenco, respectivamente. Las islas más grandes de Tenerife y Gran Canaria, que se espera que hayan recibido la mayor afluencia de migrantes poshispánicos, mostraron frecuencias muy similares en los componentes démicos. Las diferencias más evidentes fueron un mayor impacto del componente ibérico en Tenerife (41 % frente al 35 % en Gran Canaria) y un mayor impacto del componente africano subsahariano en Gran Canaria (20 % frente al 10 % en Tenerife).
Este estudio, advierten sus autores, «tiene ciertas limitaciones debido a la representación heterogénea en las bases de datos de mitogenomas humanos de poblaciones mundiales, lo que refleja un sesgo medible hacia la representación de más datos genéticos de poblaciones europeas que de poblaciones africanas. Los datos limitados de la región del norte de África son especialmente importantes. Debido a esto, las influencias del norte de África deben interpretarse con cautela, ya que la genética de las poblaciones de esta región sigue estando poco caracterizada a escala genómica.
l estudio fue aprobado por el Comité de Ética en Investigación del Hospital Universitario Nuestra Señora de Candelaria (CHUNSC_2020_95) y realizado de acuerdo al Código de Ética de la Asociación Médica Mundial (Declaración de Helsinki).
Este conjunto de datos constituye la cohorte poblacional más extensa para estudios médicos de la población canaria, que involucra a cerca de 7.000 donantes seleccionados aleatoriamente, con edades comprendidas entre los 18 y los 75 años de las siete islas principales y sin sesgo de género. Se seleccionaron para el estudio 896 muestras de ADN de donantes no emparentados. Las muestras seleccionadas para este estudio autodeclararon que los cuatro abuelos nacieron en la misma isla y que no tenían antecedentes personales de enfermedades cardiovasculares, metabólicas, inmunológicas o cancerosas.
El número total de individuos secuenciados por isla osciló entre 52 y 215. Por isla, de oeste a este, el número de individuos secuenciados fue el siguiente: El Hierro, 106; La Palma, 101; La Gomera, 136; Tenerife, 175; Gran Canaria, 215; Fuerteventura, 52; y Lanzarote, 111