PLANETA CANARIO
El Ayuntamiento de Arico se ha decidido a erradicar el campismo ilegal en su costa. Tal así que ha emprendido una campaña policial que se ha saldado con el desalojo de más de 300 casetas y 200 autocaravanas.
El municipio es tradicionalmente un lugar muy apetecido para estas actividades, y durante años se hizo la vista gorda. Pero la realidad es que tienen mucha demanda en la isla, y carecen de áreas de servicio para ello, por lo que el consistorio ariquero reitera su petición al Cabildo de Tenerife para que planifique lugares legalizados para acampar y estacionar autocaravanas.
Tras el cierre del ex cantón militar (un espacio donde está prevista una inversión de 363 millones en un gran complejo turístico de cuatro hoteles con casi 3.000 camas) y hasta hace poco escenario de fiestas y carreras ilegales, y de grandes masificaciones de chabolistas y autocaravanas, la Policía Local ha vuelto a actuar contra los campistas, esta vez, en los núcleos de Las Ceras, El Porís de Abona y Abades.
Los agentes han cortado doce accesos, tres en Abades: en el entorno de la montaña de Abades y en la explanada del embarcadero, ocho en El Porís: algunos entre La Zarnosa y Callao Grande, y el resto entre La Punta y el faro, y uno en Las Ceras: debajo del túnel de acceso a la playa El Bonito.
Tal y como informó en un comunicado el concejal de Seguridad, Andrés Martínez, “las intervenciones policiales se han dividido en tres fases cada semana: notificación, cortes de acceso y desalojo.
De lunes a viernes los agentes patrullaban las zonas afectadas, informando a los campistas del inminente corte de los accesos, y los fines de semana, en aquellos núcleos en los que todavía no se había podido completar las acciones preventivas, se procedía a desalojar reactivamente, alcanzando esas 500 intervenciones”.
El consistorio destaca que los cortes de las pistas se han realizado con piedras y tierra del entorno, y que mayoritariamente los caravanistas han colaborado con las autoridades.
A estos doce cerramientos hay que sumar los quince que se hicieron el pasado mes de septiembre en el antiguo cantón militar, los cuales se siguen vigilando para garantizar su efectividad: “La medidas que se tomaron en su momento en el ex cantón militar hemos visto que han surtido efecto, de ahí que hayamos actuado bajo el mismo criterio en Las Ceras, El Porís y en el resto del pueblo de Abades. Aunque sea pronto para sacar conclusiones, ya es notable que la afluencia de campistas se está reduciendo de manera considerable”.
Un problema insular con solución insular
El concejal ariquero explica que “la responsabilidad de poner orden y defender el paisaje de Arico es nuestra, y como tal, actuamos, pero el Cabildo debe ser consciente de que los campistas que se vayan de aquí acabarán en otro punto, seguramente no regularizado, de Tenerife, así que es urgente que se pongan manos a la obra y redacten una estrategia insular para encontrarle una alternativa legal a los caravanistas».
«Nosotros le tendemos la mano al gobierno de la isla para albergar una parte proporcional y asumible de caravanas, pero no para destrozar nuestro territorio e interrumpir la tranquilidad de nuestros vecinos mientras el Cabildo sigue mirando a otro lado”, añade el edil.
El concejal afirma que todavía no han terminado su «lucha» contra el campismo ilegal, pues falta actuar en algunos núcleos costeros más. El siguiente paso, aclara, será limpiar de residuos las parcelas que habían tomado los caravanistas y finalmente sacar delante un proyecto de restauración ambiental y recuperación con especies autóctonas propias de los ecosistemas naturales.