PLANETA CANARIO
Puerto de la Cruz revivió este 24 de junio el Baño de las Cabras, una tradición que se remonta siglos atrás pero que se recuperó en 1986, de la mano del Premio Canarias Manuel Lorenzo Perera, maestro y etnógrafo, presente en el acto, junto a miembros de la corporación municipal, con el alcalde, Marcos González, a la cabeza.
Unas 400 cabras fueron introducidas en el agua para darles un chapuzón y cumplir así una superstición ancestral de purificación del ganado en la entrada del verano, ante la curiosa mirada de cientos de personas, una parte de ellos turistas.
Esta fiesta ha suscitado también críticas de colectivos animalistas. Así el Partido contra el Maltrato Animal (PACMA) ha advertido que las cabras muestra «un gran estrés y pánico cuando las fuerzan a entrar en el agua y les hace ahogadillas, por lo que gritan, tiran e intentan huir». Critica por ello el PACMA que el Ayuntamiento portuense permita y fomente este rito «a pesar del malestar de los animales».

Amid comprende que esta tradición tiene «una dimensión espiritual y de reconocimiento de la importancia histórica de las cabras para la supervivencia humana en Canarias, frente a quienes quieren matarlas a tiros cuando se asilvestran en espacios naturales para no dañar la flora autóctona o quienes cazan solo por fines deportivos animales».
Pero nuevamente pone de relieve que «debemos adecuar las tradiciones a la evolución moral de la sociedad, pues no siempre porque algo sea tradición es necesariamente bueno desde la perspectiva ética».
Así las cosas, este jueves de San Juan los rebaños bajaron de la parte alta del Valle de La Orotava a la playa más histórica de Puerto de la Cruz. El alcalde expresó su gratitud a todos los colectivos participantes, desde los propios cabreros hasta la asociación Auchón Guanil con la exhibición el juego del palo, incluyendo a José Manuel Espinel que lidera la recuperación de los juegos canarios de inteligencia que completaron junto a los miembros del aula de Educación de la Universidad de La Laguna una mañana repleta de la celebración de un sentimiento que ahonda en nuestras raíces por siglos.

“Y es aquí donde la figura de Manuel Lorenzo Perera se agiganta para ofrecerle un homenaje tan merecido y que con tanto cariño dedicamos desde nuestra ciudad hacia su ingente labor por la recuperación de la cultura popular canaria”, explicó el regidor municipal, según informó el Ayuntamiento en un comunicado.

González quiso subrayar “ese mensaje de cuidado e impulso de nuestras tradiciones que tanto tienen que ver con nuestro origen y también con esa oportunidad de distinguir a la ciudad como un lugar que celebra y comparte esa identidad que estos días es tan palpable”.
