PLANETA CANARIO
El lenguaje silbado reproduce con silbidos la lengua hablada. Transmitido de maestros a discípulos a lo largo de siglos, el silbo gomero está inscrito en Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial desde 2009 siendo el único lenguaje silbado del mundo plenamente desarrollado y practicado por una comunidad numerosa (más de 22.000 personas).
Aparte de en La Gomera, el lenguaje silbado se utilizaba con certeza documentada en las islas de El Hierro, Tenerife y Gran Canaria, siendo muy probable su uso también en La Palma. No se descarta su primitiva utilización en Fuerteventura y Lanzarote, solo que no se dispone de constancia alguna de tal fenómeno en estas islas.
Dos investigadores de la Universidad de Ruhr, Bochum (Alemania), realizan actualmente sus tesis de carrera de Psicología y Neurociencia cognitiva en relación a la actividad cerebral en el lenguaje silbado. Jonathan Schuchert y Alina Shamayeva se encuentran actualmente recopilando datos y realizando pruebas en El Hierro que den soporte a esta novedosa aplicación del silbo.
Llevan semanas grabando datos de silbadores pertenecientes a diferentes islas y esperan poder obtener una comprensión más profunda de los mecanismos necesarios para procesar un lenguaje silbado. Schuchert y Shamayeva están monitorizando directamente la actividad cerebral al emplear esta comunicación, el objetivo es examinar si el hemisferio derecho juega un papel más importante en la comprensión del silbo.
De confirmar su tesis, la gran esperanza desde la Universidad del Ruhr es que el silbo podría formar parte de una nueva terapia para pacientes con problemas de comunicación que presenten daños en el hemisferio izquierdo como resultado de un ictus o accidente externo, usando más esas partes del cerebro que aún funcionan correctamente.
Fue en 2005 cuando apareció el primer estudio neurocientífico hecho con silbo gomero en el que se demuestra que se activan en el cerebro las mismas regiones al escuchar el silbo que al escuchar hablar nuestro idioma. Diez años después aparece el trabajo del profesor Güntürkün, de la Universidad del Ruhr, con el silbo turco, que señala además que el lenguaje silbado, al contrario que el lenguaje hablado, no está lateralizado en el hemisferio izquierdo, es decir, ambos hemisferios trabajan «casi al mismo nivel».
El silbo turco, un lenguaje tan singular como el gomero
Desde 2017, el silbo turco se encuentra en Lista del Patrimonio Cultural Inmaterial. Su uso nació entre las poblaciones de regiones montañosas abruptas, debido a la necesidad de encontrar un medio para comunicarse rápida y fácilmente a largas distancias. Tal y como sucedió en el Archipiélago con nuestro silbo.
Desde esta misma universidad están realizando ahora la primera investigación de un lenguaje silbado con electroencefalografía (EEG), un método que permite grabar los cambios eléctricos en la actividad cerebral. La neurociencia muestra un gran interés en el lenguaje silbado como medio de comunicación, dado que su procesamiento es diferente del lenguaje hablado.