VICENTE PÉREZ
La organización Empty The Tanks (en español ‘Vaciar los Tanques’) celebra este sábado 11 de mayo manifestaciones en 60 ciudades de todo el mundo para protestar contra el cautiverio de delfines y orcas.
En el caso de Tenerife, la manifestación está prevista en Puerto de la Cruz, concretamente en la avenida Loro Parque, de 11 a 13 horas.
Con este, ya son 12 años seguidos en los que se celebra esta protesta, que los convocantes pretenden que sea «pacífica» y exclusivamente para la finalidad de manifestar el rechazo a que se mantengan cautivos cetáceos en zoológicos y se les utilice en espectáculos, una causa que consideran, por encima de todo, «ética».
«Lucrarse con el sufrimiento de los animales es inmoral, pues no hay nada científico ni educativo ni de preservación de especie en este circo; se les priva de su medio natural para mantenerlos en una cárcel», afirma la representante de Empty The Tanks en Tenerife, Maki Afonso.
Vaciar los Tanques deja claro que «no es un movimiento radical que exija la liberación de todos los mamíferos marinos cautivos en su hábitat natural, pues, si bien algunos de estos animales en zoos pueden ser grandes candidatos para la liberación, aquellos que no lo son deben retirarse a santuarios marinos, donde puedan disfrutar el resto de sus días en agua de mar natural, sintiendo las olas del océano a su alrededor».
Esta alternativa de santuarios marinos, es lo que proponen para cetáceos que se encuentren en esta situación y que no puedan ser liberados a mar abierto, al haberse criado en cautividad. Aunque otros usados en espectáculos en Canarias fueron capturados cuando estaban libres en el océano, asegura la portavoz de este movimiento ecologista.
Todos los delfines y orcas en zoológicos «son obligados a hacer numeritos de circo para obtener comida, peces muertos de un cubo, con música atronadora, varias veces al día», explica Afonso.
En su cautiverio, relata, estos cetáceos «viven en tanques de cemento que son 200.000 veces más pequeños que su hábitat natural, el océano».
Y esta organización pone de relieve que las «las orcas y delfines son animales altamente inteligentes, muy sociales, viven en grupos familiares y se comunican con sus propios dialectos», por lo que «tenerlos en piscinas durante 30 o 50 años dando vueltas y siendo explotados por dinero, es una absoluta crueldad y un sufrimiento terrible para estos animales».